sábado, 28 de agosto de 2010

GURE AHALEGINAK

A finales de Abril de 1988 nace Gure Ahaleginak. Un año antes, se planta el primer viñedo que rodea la propiedad.
En aquella época mis hijos Arkaitz y Sugai tenían tres y casi dos años respectivamente cuando nos trasladamos un venticinco de Mayo de Amurrio a vivir en Gure Ahaleginak.


Gure Ahaleginak, como su nombre indica; nuestros esfuerzos, se le puso al trabajo personal realizado en la finca y en la casa por mi marido y yo. Todo lo que ha estado en nuestra mano lo hemos trabajado y hasta nuestros hijos bien pequeños colaboraban en las tareas de la viña y la bodega, amén de estar educados en las tareas domésticas del hogar.

Recuerdo que con siete años ya vendimiaban y Arkaitz a la temprana edad de 9 años, llevaba el tractor por entre las filas de viñas para que su padre y yo sulfataramos con la pistola. Con razón ambos dicen que casi sus primeros recuerdos en la vida es el de correr entre viñas.
Viñedos y Bodega Gure Ahaleginak ha ido creciendo poco a poco con la familia Larrazabal Durana, hasta convertirse en lo que es hoy día.
Txetxu y yo comenzamos esta apasionante historia con casi 32 años en el 87. Hoy 23 años después, el testigo está en manos de mi hijo mayor Arkaitz que está rigiendo los destinos de Gure Ahaleginak con mucho acierto. Estoy totalmente de acuerdo con todas sus innovaciones y proyectos además como suelo decir: "es un culo inquieto" y siempre está en continua formación e investigando y experimentando cosas en el viñedo y en Bodega.

Los viñedos y la Bodega son visitables todos los días del año, excepto San Isidro, que ese día nos dedicamos en exclusiva a darle gracias. Para visitarnos sólo tenéis que poneros en contacto con el 658744181 Arkaitz o en el 605746277 Maite, y vereís y degustareis algo que os sorprenderá sin duda alguna, porque el txakolí Gure Ahaleginak no deja indiferente a nadie, además de recibir una magistral clase de cata.
Arkaitz acaba de pasar sus vacaciones en Portugal haciendo enoturismo y probaremos los vinos de Oporto, con algún postre que nos haga Sugai, mi otro hijo que además de cocinero es pastelero.
Gure Ahaleginak lo tiene casi todo, únicamente nos faltas tú que nos haces crecer.


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