La climatología no impidió que el tradicional mercado gastronómico volviera a tomar el corazón de la Villa de Bilbao con 140 puestos distribuidos entre el Arenal y la Plaza Nueva. El encuentro anual en el que los Baserritarras llevan de sus caseríos los mejores productos de la temporada para vender en la Feria el primer día de invierno. Productos de alta calidad.
Pan, Talo, queso, txakolí, Sidra, chorizos, Pastel Vasco, Rosquillas de anís, Verduras, Hortalizas, Fruta,mermeladas, capones, patos, gallos, caracoles, flores y muérdago, pintxos a discreción recién hechos y más productos completaron un Santo Tomás presidido por la lluvia y el buen humor.
En lo que respecta al Txakolí Gure Ahaleginak, -fotografías que dejamos para el recuerdo -de esta edición del año 2010, a las 15 horas 30 minutos, vendimos los últimos txikitos de txakolí. Un 80% se vendió para tomar en la feria y el resto para llevar a casa.
En este nuestro segundo año en la Feria, la bodega llevo un 30% más que el año pasado.En la Feria Arkaitz Larrazabal, enólogo de la Bodega
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