Después de desayunar en la Ciudad Universitaria, Ciudad Patrimonio de la Humanidad y Ciudad Europea de la Cultura, como se la conoce a Salamanca pusimos rumbo a Portugal, atrás dejábamos la ruta del Románico, la Religiosa y la Jacobea para otra ocasión y adentrarnos en otro mundo, otra cultura: La de los vinos de Oporto.
Oporto se encuentra al norte del país y es la segunda ciudad más importante, Se comenta que de Porto(en portugués) deriva el nombre del país: Portugal y que seguramente procede del viejo topónimo de Porto Cale.
Llegamos para comer a la 14:30 h.-en Portugal es una hora menos- y la costumbre es de comer entre las 13 a las 14:30h. En el Centro de Oporto comimos en la terraza de un restaurante el plato típico "Bacalhau" dourado con bastante guarnición y una ensalada, regado con un vinho verde de uva alvarinho, Como las raciones son grandes, no pedimos postre.
Nos dirigimos al Hotel **** -que aquí en Euskadi se le caería alguna- y volvimos al Centro de Oporto para pasar la tarde.
La principal calle de tiendas de Porto es Santa Catarina, -peatonal- donde se encuentran las firmas internacionalmente reconocidas; tiendas de ropa, de souvenirs, y un extenso centro comercial. Nos llamó poderosamente la atención la cantidad de tiendas de calzado así como Pastelerías en las cuales podías incluso comer. La calidad de los pasteles vam
os a dejarlo sin comentarios, porque evidentemente la vista me jugó una mala pasada y mi marido pagó las consecuencias de comerse la mitad del pastel.
El sábado por la mañana, cogimos el autobús nº 600 que te deja en la plaza de los Aliados de Oporto donde está ubicado el ayuntamiento, para realizar nuestras compras-regalos. Además como llovía, apetecía ir de tiendas. Por la calle no faltaban las mujeres anunciando paraguas para no mojarse a 5 euros, así como gente mayor pidiendo limosna a gritos como si fuera un bando.
Para otro capítulo dejo el tema de las bodegas que hay a la otra parte de Douro en Vila Nova de Gaia donde nos encontramos con un conocido matrimonio de Orduña y su hijo, y juntos visitamos la más grande y famosa de las bodegas. 
Fotografías para el recuerdo del Centro de Oporto
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